Agents of S.H.I.E.L.D: Reseña Episodio 5

Si en reseñas pasadas me quejaba del descenso en la calidad de las historias narradas en "Agents of S.H.I.E.L.D." y manifestaba mi esperanza de que Joss Whedon lograra retomar el nivel alcanzado por el capítulo piloto, hoy puedo celebrar que justamente esto es lo que sucedió en la quinta entrega de la serie. "Girl with the Flower Dress" fue un capítulo lleno de sorpresas, misterios que se resuelven para dar lugar a nuevos enigmas... y un supervillano listo para hacer arder el mundo.

La acción inició en Hong Kong, donde el mago callejero Han Sho Yin (Louis Osawa Changchien) tuvo un encuentro casual con la misteriosa mujer del vestido floreado, Rayna (Ruth Negga). Tras llevarla a su apartamento y revelarle sus superpoderes piroquinéticos, ella hace entrar a varios hombres con trajes protectores que lo secuestran. El Agente Kwan (Tzi Ma) de la oficina de S.H.I.E.L.D. en Hong Kong reporta la desaparición, lo que lleva al equipo de Coulson a descubrir que S.H.I.E.L.D. ha sido hackeada por Rising Tide. Evidentemente todas las sospechas caen sobre Skye, quien se ve obligada a rastrear al verdadero hacker para demostrar su fidelidad al equipo.

Su investigación los lleva a Texas en persecución de un afamado hacker llamado Miles (Austin Nichols). Pero cuando Ward lo tiene a la vista, el hacker recibe un mensaje que le permite escapar. En un giro inesperado, descubrimos que ha sido la propia Skye quien alertó a Miles y que ambos son amantes. Los dos son descubiertos por la Agente May y puestos bajo custodia. La traición de Skye es un balde de agua fría para el equipo, pero sobretodo para Coulson. Tras un interrogatorio y gracias a las evidencias encontradas por Fitz y Simmons, Miles confiesa haber hackeado S.H.I.E.L.D. para venderle la información a una mujer con un vestido de flores. Skye se muestra sorprendida ante la falta de escrúpulos del hombre que creía conocer, mientras que él se defiende alegando que corroboró los antecedentes de la mujer y que sólo tiene inversiones en investigación de ciempiés.

Y es allí cuando Whedon nos trae de vuelta los acontecimientos del capítulo piloto y el misterioso Proyecto Ciempiés. En Hong Kong, Rayna convence a Han de permitirle potenciarle los poderes mediante un suero experimental, dándole además un nuevo nombre: Scorch (¡así es, Coulson: le dieron nombre!). Pero lo que parece ser un intento por generar un nuevo sujeto con superpoderes, pronto se revela como un complot para robarle sus capacidades biológicas de control piroquinético para estabilizar la fórmula con base en el Extremis. Nuevamente aparece la doctora Debbie (Shannon Lucio), a quien recordamos por haber estado detrás de la operación en Los Ángeles.

Mientras ella y Rayna le roban sus poderes a Scorch, Coulson y May se unen al Agente Kwan para asaltar el edificio donde han logrado rastrear el paradero de Han. Pero cuando llegan hasta el laboratorio, se encuentran con un Scorch enfurecido que mata al Agente Kwan y desea vengarse de Rayna y Debbie. Y aunque la primera logra escapar, la segunda sufre la ardiente ira de Scorch. Ward decide liberar a Skye para que le ayude a tomar el control del edificio y así salvar a Coulson y May. Tarea para la cual también debe confiar en las habilidades de Miles. Pronto la misión pasa de ser un rescate para convertirse en una situación crítica de contención de un superhumano enfurecido, y Coulson toma la decisión de darle una sobredosis letal de Extremis para hacerlo explotar.

Tras finalizar la misión, el equipo abandona a Miles en Hong Kong sin dinero y con un brazalete que le impide utilizar dispositivos electrónicos. Skye también enfrenta su castigo cuando debe darle la cara a Coulson, quien le recrimina su traición y sus continuas mentiras. Con lágrimas en los ojos, la hacker le revela la verdadera razón de por qué se volvió miembro de Rising Tide y por qué se infiltró en S.H.I.E.L.D.: la única pista que tiene sobre la identidad de sus verdaderos padres es una carta clasificada y censurada por S.H.I.E.L.D. Coulson promete ayudarla a encontrar la verdad, pero ya no confía en ella, por lo que le da un brazalete similar al de Miles para que ella se lo coloque.

En una escena final, la misteriosa Rayna se reúne con un prisionero en una cárcel, el cual dice no hablar por sí mismo y al que ella le solicita consultar con "El Clarividente". Antes de irse, el prisionero le halaga el vestido floreado que lleva puesto (de color negro con rojo... ¿alusión a algo?).

Gracias a este episodio por fin tenemos avances importantes en la trama de la serie. La identidad de Skye como doble agente infiltrada en S.H.I.E.L.D. ya estaba resultando un tanto engorrosa, por lo que ha sido una buena decisión resolver ese cabo suelto, preparando el escenario para un misterio que parece más interesante: ¿Quiénes son los padres de Skye? Y más aún, ¿quién es realmente Skye? Coulson y Melinda "La Caballería" May siguen demostrando por qué son de lo mejor que tiene S.H.I.E.L.D. Momento especialmente genial para los fans fue cuando Coulson utilizó un dispositivo explosivo similar al que utilizó en "Iron Man", mientras enfatiza cuánto le gusta utilizarlos. Y con el regreso del Proyecto Ciempiés, la red está al máximo con teorías fans sobre quién está detrás de los intentos por crear nuevos supersoldados. Más ahora que se ha hecho referencia a dos personajes de los cómics: Scorch y Rayna (aunque con esta última no está claro si se trata de la misma Raina de las viñetas, ya que luce muy diferente).

"Agents of S.H.I.E.L.D." continúa esta semana tras el estreno de la película "Thor: The Dark World", con la promesa de Joss Whedon de que los hechos que ocurren en dicha cinta tendrán repercusiones directas en la serie en próximos capítulos.