Agents of S.H.I.E.L.D: Reseña Episodio 9

"Agents of S.H.I.E.L.D." se ha convertido en una serie un tanto difícil de entender. No porque su trama sea muy compleja y enredada, sino porque las decisiones de producción alrededor de ella son en ocasiones incomprensibles. El noveno episodio titulado "Repairs" es un buen ejemplo de ello. Mientras que la semana pasada critiqué el hecho de que se hubiese publicitado tanto el capítulo "The Well" relacionándolo con la película "Thor: The Dark World", cuando al final la historia tenía poco que ver, esta semana el episodio tuvo un vínculo mucho más directo con la misma cinta pero nada se dijo al respecto. ¿Quién los entiende? Pero a esto regresaremos más adelante.


Uno de los aspectos llamativos de la historia en este noveno capítulo es que nos dio una aventura con la cual conocimos un poco más de la silenciosa y reservada agente Melinda May, conocida también como "La Caballería". Y justamente el capítulo abrió aprovechando el cliffhanger de la semana previa, pues se nos confirmó que May y Ward mantienen un romance a escondidas del resto del equipo. Ambos siguen una rutina en la cual cada quien llega por su lado al "Bus" tras pasar la noche juntos para así no levantar sospechas cuando son llamados para una misión. Y en este caso la misión es lo que Skye llama "el comité de bienvenida" (aunque al final no resultó tan lindo como sonaba). Coulson y su equipo buscan proteger a la inspectora de seguridad de la empresa StatiCorp, Hannah Hutchins (Laura Seay), quien a raíz de un fatal accidente en un colisionador de partículas donde murieron 4 de sus compañeros, se sospecha que podría haber demostrado poderes telequinéticos. Cuando el equipo llega a buscarla a su casa, se encuentra con una situación tensa donde la policía local trata de mantener a raya a una multitud enardecida que la culpa por el accidente. Después que al parecer Hannah acciona inconscientemente un camión en contra de la gente, Melinda May le dispara con el arma "Buenas Noches".


Ya en el avión, Skye muestra su descontento ante los métodos directos y violentos de May. Por su parte, Coulson habla con Hannah para tranquilizarla, aunque a ella se le mantiene dentro de la celda de contención por su propia seguridad. Pero cuando le dice sobre las sospechas de sus poderes telequinéticos, ella rechaza la idea insistiendo que son demonios lo que la persigue. Mientras Fitz y Simmons analizan la explosión ocurrida en el colisionador, Jemma descubre que al parecer se habría abierto un portal a otro mundo. Pero cuando llama a Fitz para comentarle sus resultados, es atacada por un hombre que aparece y desaparece con una llave de tuercas en la mano. El extraño fantasma sabotea el "Bus", el cual pierde energía obligando a May a aterrizarlo de emergencia en una zona boscosa alejada. Y aunque Coulson intenta comunicarse con S.H.I.E.L.D. para informar su situación, el fantasma se encarga de destruir las antenas.


Desde ese momento el equipo se enfrenta a un enemigo que aparece y desaparece a voluntad, mientras tratan de proteger a Hannah. Previendo lo peligroso y precaria de su situación, Melinda May decide llevarse a la chica del avión para atraer al fantasma hasta un viejo granero donde poder emboscarlo. Allí, Hannah logra identificar al extraño atacante como Tobias Ford (Robert Baker), uno de los trabajadores que se creía que había muerto durante el accidente. Tobias le confiesa a Hannah que él saboteaba el colisionador de partículas para poder verla a ella, pero que nunca esperó que algo saliera tan mal y que sus compañeros murieran. Él está convencido que ese otro mundo donde se encuentra atrapado es el Infierno, a donde ha ido por sus pecados. En un giro llamativo, le toca el turno a May de ser diplomática y convencer al fantasma para que deje en paz a Hannah si realmente la ama. Tobias accede y desaparece.


Durante esta historia, y gracias a Fitz y Simmons que tratan de tomarle el pelo a una novata Skye con respecto al pasado de Melinda May, descubrimos que su apodo de "La Caballería" proviene de un incidente en Bahrein donde ella sola liberó a varios agentes prisioneros de un "sujeto con poderes especiales" y sus seguidores. Pero, como le dice un entristecido Coulson a Skye, algo sucedió durante la operación que la transformó para siempre de una chica que le gustaba reír y hacer bromas, a la dura May que todos conocemos. Sea lo que sea que sucedió, ella nunca se lo ha querido decir a nadie, ni siquiera a Coulson. Pero hacia el final del episodio Coulson le pregunta que fue lo que le dijo a Tobias para que dejara en paz a Hannah, y May le responde con lágrimas en los ojos: "Lo mismo que usted me dijo en Bahrein".


Como dije al inicio de esta reseña, esta historia se siente más cercana a la última película del Dios del Trueno, pues como Jemma Simmons descubrió, aparentemente la explosión del colisionador ocurrió mientras StatiCorp buscaba abrir un portal entre mundos similar a los que se abrieron durante el evento de la Convergencia que se ve en "Thor: The Dark World". Definitivamente esto es más cercano a la cinta que la historia del báculo berserker del capítulo anterior.


En resumen, "Repairs" es un capítulo lento y sin muchas sorpresas que nos da nuevos datos sobre el misterioso pasado de Melinda May. Pero esto abre nuevas interrogantes y responde muy poco a las preguntas que ya teníamos. ¿Será que algún día Joss Whedon nos dará alguna respuesta concreta en "Agents of S.H.I.E.L.D."?

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