Iniciar con Buen Arte
Uno de los elementos que más llama la atención de la serie televisiva de HBO, "Game of Thrones", es el trabajo artístico de sus títulos de apertura. Ganadores de un premio Emmy por su diseño y edición, estos títulos fueron concebidos por el editor Angus Wall, cuya trayectoria en el diseño de títulos y la edición fílmica es bastante reconocida en Estados Unidos.
En el caso de "Game of Thrones", Wall se enfrentó al reto de generar unos créditos que ayudaran a los espectadores a ubicarse geográficamente en el mundo fantástico creado por George RR Martin en sus novelas de la saga "Canción de Hielo y Fuego". Si bien la idea original consistía en un cuervo sobrevolando un inmenso mapa plano de los Siete Reinos del Poniente, poco a poco fue evolucionando hasta concretarse como una enorme esfera mecánica vista desde adentro, donde las diferentes ciudades como Desembarco del Rey o Invernalia salen del suelo mediante engranajes y palancas. Cada ciudad cuenta con un engranaje principal que ostenta el emblema heráldico de una las principales Casas del Poniente: la cabeza de lobo huargo de los Stark, el ciervo coronado de los Baratheon, el dragón de tres cabezas de los Targaryen...
Para el diseño de las maquetas digitales de cada lugar, Wall se inspiró en el trabajo de Leonardo Da Vinci. En el centro de todo, un astrolabio mecánico funge como el sol que ilumina los Siete Reinos.
La secuencia cambia a lo largo de la serie, siguiendo a los personajes por nuevos escenarios dentro del mapa. Así, el espectador se mueve desde la Ciudad Libre de Pentos hasta Vaes Dothrak, o se traslada al Nido de Águilas y después a Los Gemelos.
"Game of Thrones" no es la primera serie de HBO en la que colabora Angus Wall con el diseño de los títulos. Ya en el 2003 había trabajado en la serie "Carnivàle", que se transmitió durante dos temporadas. Ubicada en los años de la Gran Depresión y el Dust Bowl, la trama se centra en dos arcos argumentales que describen la eterna lucha entre el bien y el mal.
Por un lado, el periplo del joven Ben Hawkins dentro de la feria ambulante del enano Samson, donde descubre que tiene el poder de devolver la vida después de quitar otra. Por el otro lado, las vivencias del predicador metodista Justin Crowe, quien descubre que tiene el poder de manipular la voluntad de las personas y manifestar sus más terribles pecados a modo de visiones.
Para estos títulos, Wall utilizó el simbolismo arquetípico y esoterista del Tarot para manifestar las raíces místicas y sobrenaturales de la serie, vinculando esto con imágenes de archivo de la realidad de aquella época: la Depresión, el Ku Klux Klan, Mussolini, el beisbolista Babe Ruth, el presidente Roosevelt... Se crea así un intrincado tapiz donde los eventos históricos son parte de la lucha eterna entre la luz y la oscuridad.
Otro de sus logros de diseño de créditos iniciales para HBO fue la elaboración de la entrada de "Rome", en donde los graffittis en las paredes de la Antigua Roma toman vida para mostrarnos fragmentos del concurrido y violento día a día de la capital del poderoso Imperio.
Comentarios