Game of Thrones: Reseña Episodio 46

"Game of Thrones" nos la volvió a hacer. Y en esta ocasión los lectores de los libros de George RR Martin no estuvimos exentos de la sorpresa y el horror. Cierto que algunos sospechábamos que con los giros que ha tomado la serie con respecto al material publicado, era de esperarse lo que sucedió al final del sexto capítulo de esta quinta temporada, titulado "Unbowed, Unbent, Unbroken". Pero una cosa es sospecharlo (y muy en el fondo desear estar equivocados) y otra cosa muy diferente es ver cómo tus peores temores se hacen realidad. Pero a esto volveremos al final de esta reseña.

Empecemos en Braavos, donde nos volvemos a topar con Arya en la Casa del Blanco y el Negro. La chica Stark continúa en sus labores de lavado de cadáveres, lo que ha hecho que en ella despierte la curiosidad por saber qué hacen con ellos los Hombres Sin Rostro. Pero los intentos de sacarle alguna respuesta a su quisquillosa compañera de trabajo son infructuosos. La Niña Silenciosa más bien le cuenta su propia historia: cómo ella era hija de un señor del Poniente, cómo su madrastra intentó envenenarla y cómo ella buscó la ayuda de los Hombres Sin Rostro para encargarse de ella. Pero apenas termina su relato, la niña desafía a Arya a adivinar cuáles partes de la historia que le ha contado son mentira. Cuando Arya es incapaz de decírselo, la niña le ordena seguir trabajando. Esa noche, Arya es visitada por Jaqen H´ghar, quien comienza a hacerle preguntas. La chica trata de engañarlo insertando mentiras dentro de su historia, pero su mentor logra descubrirlas con facilidad y la golpea con una vara. El momento cumbre sucede cuando Jaqen la golpea cuando ella dice odiar al Perro Clegane. Arya indignada insiste en que ella sí lo odia, pero solo recibe otro golpe, pues como dice Jaqen: "La niña me miente a mí, le miente al Dios de Muchos Rostros y se miente a ella misma". Esto es demasiado para Arya, quien dice ya no querer jugar. Pero Jaqen le deja claro que nunca se deja de jugar.

Más adelante, mientras Arya limpia la sala principal del templo, un hombre se le acerca llevando consigo a una niña enferma. El hombre llorando le dice a Arya que ha intentado todo para curarla, pero que la niña sigue sufriendo. Él le suplica para que lo ayuden para que la niña deje de sufrir. En una escena muy conmovedora, Arya se la acerca a la niña y le cuenta su propia historia para reconfortarla. Claro que es una historia que es mentira. Tras terminar, Arya le ofrece a la niña un cuenco con el agua del templo, la cual da el don de una muerte tranquila. Todo esto lo mira Jaqen desde un rincón y decide que es hora de que Arya descubra que hacen con los muertos. Tras buscarla mientras ella limpia el cuerpo de la niña, la lleva por unas profundas escaleras hasta unos salones gigantescos donde se levantan varias columnas llenas de rostros humanos. La escena está magníficamente bien lograda y hace que a uno, como televidente, se le ponga la piel de gallina. Es en ese impresionante lugar donde Jaqen le dice a Arya que, aunque ella no está preparada para convertirse en "Nadie", sí está lista para convertirse en alguien más. ¡Wow!

También en Essos, pero en las cercanías de la Antigua Valyria, Tyrion Lannister por fin le cuenta a Jorah Mormont de su exilio por haber matado a su propio padre. La conversación toma un giro inesperado cuando el Gnomo compara a Lord Tywin con el difunto Lord Comandante Mormont, sin saber que Ser Jorah aún no sabe nada de la muerte de su padre. La noticia es muy dura para Jorah (sobretodo tomando en cuenta que ahora está enfermo de psoriagrís). Mientras prosiguen su camino, ambos viajeros hablan sobre Daenerys Targaryen y sobre si será una gran reina o si más bien será como su padre, el Rey Loco Aerys. Lo malo es que la conversación los distrae lo suficiente para ser emboscados por piratas esclavistas que los hacen prisioneros. Tyrion usa su ingenio para evitar ser degollado, castrado y que su pene mutilado sea vendido a un mercader de penes (sí, parece que existe tal profesión en Essos). Incluso logra convencer a los piratas de cambiar de ruta y en lugar de ir a Volantis, dirigirse a Meereen, donde Daenerys ha reabierto los fosos de pelea y los piratas podrían ganar buen dinero con las habilidades de Ser Jorah Mormont. ¡Nada como regresar a la Bahía de los Esclavos siendo esclavo!

Cruzando el Mar Angosto, en Desembarco del Rey, Petyr Baelish regresó a la capital para encontrársela bajo el control de la Fe Militante. El propio Hermano Lancel sale a su paso para darle la "bienvenida", dejándole en claro que los proxenetas ya no son bien recibidos en la ciudad. Pero el habilidoso Meñique no se deja amedrentar y saca a colación el estar allí por orden misma de la Reina Cersei. Si el Hermano Lancel tiene algo que decir al respecto, puede hablarlo con ella.

Y es en la reunión con Cersei donde confirmamos lo embustero que Meñique puede ser. Cersei lo ha convocado para asegurarse de contar con el apoyo de las fuerzas del Valle de Arryn en caso de que estalle la guerra entre los Lannister y los Tyrell. Baelish no solo le asegura su lealtad (algo que evidentemente Cersei no se cree mucho), sino que además le dice haber encontrado a Sansa Stark como huésped de los Bolton en Invernalia. Tal traición del Señor de Fuerte Terror enfurece a la Reina Madre. Pero claro, Meñique tiene la solución: dejar que Roose Bolton y Stannis Baratheon se destruyan entre ellos y después marchar con las fuerzas del Valle de Arryn en contra del vencedor. Por supuesto Meñique tiene precio para su lealtad: el título de Guardián del Norte. Cersei acepta siempre y cuando él coloque la cabeza de Sansa en una pica. Es increíble cómo Petyr Baelish se las ingenia para manipular todos los conflictos creando las condiciones para salir siempre como ganador sin importar el escenario. ¡Un desgraciado demasiado calculador!

Cersei tiene buenas razones para pensar en un posible conflicto con los Tyrell. Tras el arresto de Ser Loras por la Fe Militante, la propia Lady Olenna Tyrell, la Reina de Espinas, regresa a la capital para confrontar directamente a la Lannister por el arresto de su nieto. Pero Cersei sabe muy bien que esta mano está a su favor e insiste en que ella no es la responsable por el arresto de Ser Loras. Además, si el chico es inocente, todo se probará en la audiencia convocada por el Gorrión Supremo para sopesar si hay evidencias suficientes para un juicio. Muy a su pesar la Reina de Espinas se ve obligada a cederle la partida a Cersei... por el momento.

Claro que la audiencia no resulta ser para nada favorable a la Casa Tyrell. Tras escuchar a Ser Loras insistiendo en su inocencia y asegurando nunca haberse acostado con otros hombres, el Gorrión Supremo dio la sorpresa al llamar como testigo a la Reina Margaery. Aunque ella al principio se rehúsa a testificar, el Gorrión Supremo le recuerda que ante un tribunal de la fe incluso los reyes y reinas deben someterse. Margaery declara bajo juramento que su hermano es inocente de las acusaciones que se le hacen y que ella nunca lo ha visto en la cama con otros hombres. Y es entonces cuando Cersei da el golpe de gracia a través del Gorrión Supremo, quien llama a testificar a Ollyvar, el escudero de Ser Loras y espía de Meñique, quien no solo confirma ser el amante del Caballero de las Flores, sino que también afirma que Margaery sabía muy bien de esa relación pues los había visto juntos en la cama. Un testimonio que le permite al Gorrión Supremo no solo mantener el arresto de Ser Loras, sino también ordenar el arresto de la Reina Margaery por haber mentido estando bajo un juramento divino. La leona dio el zarpazo y las rosas han quedado en una posición muy delicada. Habrá que ver qué hará ahora la Reina de Espinas para salvar a sus nietos y arreglar cuentas con Cersei Lannister.

El título de este capítulo se debe al lema de la Casa Martell de Dorne. Y sin embargo, esta fue la parte menos interesante del mismo. El hecho de que todas las escenas de los Martell hasta el momento se desarrollen en los mismos jardines y el poco tiempo en pantalla para ahondar en los personajes, hace que esta línea narrativa que es muy interesante en los libros, en la serie está cautivando poco a los fans. El Príncipe Doran reflexiona sobre lo peligroso que es una relación entre un Martell y una Lannister mientras mira de lejos el paseo del Príncipe Trystane de la mano de su prometida, la Princesa Myrcella Baratheon. Al mismo tiempo, Jaime Lannister y Bronn ingresan en los Jardines del Agua disfrazados como soldados dornienses para poder encontrar a Myrcella y llevársela sin llamar la atención. En otro sitio, las Serpientes de Arena se reúnen con Ellaria Arena, listas para accionar su propio plan de secuestro contra Myrcella y así desatar la guerra entre la Corona y Dorne. Ambos grupos de secuestradores se encuentran al tratar de atrapar a la princesa y estalla el combate: Ser Jaime y Bronn por un lado y Obara, Nymeria y Tyene por el otro. Una coreografía que, aunque llamativa, le falta la emoción que hemos visto en otras peleas en la serie. Después del combate entre Jaime y Bronn contra los jinetes dornienses, uno siente que aquí se están conteniendo sin una justificación aparente. Lo cierto es que todo termina cuando los combatientes son rodeados por los soldados de Areo Hotah, quien los obliga a todos a tirar sus armas al suelo y rendirse. De inmediato, un grupo de soldados busca a Ellaria en su escondite y también la arresta. Sin duda, estos dos fueron los complots de secuestro más inútiles en la historia del Poniente.

Y bueno, llegamos por fin a ese traumático final. En Invernalia, Sansa Stark se alista para su boda con Ramsay Bolton. Para su baño, es visitada por Myranda, quien se ofrece a ayudarla. Claro que las intenciones de la joven son otras y aprovecha la ocasión para contarle a Sansa sobre las novias pasadas de su prometido, así como del siniestro final que tuvieron cuando Ramsay se aburrió de ellas. Las enseñanzas de Meñique han hecho más suspicaz a Sansa, quien confronta a Myranda haciéndole ver que ella sabe muy bien que ella está enamorada de Ramsay, que está celosa por la boda y que aquello lo está haciendo para tratar de asustarla. Pero ella es Sansa Stark, Invernalia es su hogar y nada de lo que ella le diga podrá asustarla. Tras esta confrontación Myranda prefiere retirarse derrotada.

Cuando llega el momento de la ceremonia, Hediondo llega bien arreglado para acompañar a Sansa al Bosque de Dioses, donde la entregará a su nuevo esposo. Él le suplica que le tome el brazo, pues Ramsay podría castigarlo si ella no lo hace. Pero para Sansa (quien cree aún que Theon mató a Bran y Rickon), lo que Ramsay le haga a Hediondo la tiene sin cuidado. Ante el Árbol Arciano del Bosque de Dioses de Invernalia, Ramsay Bolton toma a Sansa Stark como esposa, en una ceremonia que puede describirse como bastante tensa. En un punto incluso todos los espectadores tuvimos la esperanza que ella dijese que no. Pero lo que pasa después es lo peor. Los recién casados llegan a sus nuevos aposentos acompañados por el servicial Hediondo. Pero cuando él está a punto de marcharse, Ramsay se lo impide y le ordena que se quede a ver. Por supuesto que esto escandaliza a Sansa, pero Ramsay le ordena que se quite la ropa, mientras le habla con cinismo a Theon, recordándole que él la vio a ella crecer como una hermana cuando niños y ahora le toca ver cómo el desgraciado de Ramsay la "convierte en mujer". La escena que sigue es de gran violencia pues, aunque no llegamos a ver cómo Ramsay viola a Sansa, sí escuchamos los gemidos de dolor de la pobre chica mientras la cámara se enfoca en el sufrido rostro de Theon, quien llora amargamente al tener que ser testigo de tal ultraje. Una emoción de angustia que muchos fanáticos compartimos mientras los créditos pasaban por la pantalla y nosotros tratábamos de asimilar lo sucedido.

Ciertamente la violación de Sansa es un cambio enorme con respecto a los libros, donde era otro personaje el que se casaba con Ramsay haciéndose pasar por Arya y quien sufría las vejaciones del despiadado bastardo. ¿Se pasaron los productores con esta escena? Yo creo que no. Esta se complementa dolorosamente muy bien con el mundo violento y terrible que nos ha mostrado "Game of Thrones" desde el primer capítulo. ¿Qué pasará con Sansa ahora? Tras su tiempo con Meñique no creo que ella vaya a mantener un papel de víctima resignada de nuevo.

Mucho habrá que esperar de los acontecimientos en el Norte, mientras esperamos volver a ver a la Khaleesi en Meereen, quien se prepara para su propia boda para consolidar su poder. Aquí está el avance del siguiente episodio, titulado "The Gift":

https://youtu.be/GZDO2ptEBcg