El Imaginario de Terry Gilliam

Guionista, publicista, animador, actor, director de cine y comediante. Todo esto es Terry Gilliam, uno de los cineastas más llamativos cuando hablamos de estética cinematográfica. Nacido en Minnesota en 1940 y dedicado en un principio a la publicidad, Gilliam abandonó los Estados Unidos con destino a Londres un tanto desilucionado por los giros políticos de aquella nación a finales de los 60`s. Lo que Gilliam no sabía es que era en el Reino Unido donde encontraría su destino creativo al formar parte de los Monty Python. En dicho grupo exploró nuevas facetas artísticas y entró en contacto con otros grandes comediantes que se convertirían en colaboradores recurrentes a lo largo de su filmografía: Eric Idle, John Cleese y Michael Palin, principalmente.

Para Terry Gilliam el tema central de sus historias es la imaginación, su gran poder para liberar y la constante lucha contra un mundo que, desde su óptica, busca truncarla. Es por ello que gusta dirigir películas sobre lo fantástico, ya sea visualizando cuentos clásicos o explorando los laberintos de la ciencia ficción. En varias ocasiones se ha definido como fanático del realismo mágico. Sus películas muestran ese gusto por lo imaginativo a través del uso de ángulos poco convencionales, lentes que distorsionan los planos y puestas en escena recargadas con elementos barrocos, período histórico artístico que fascina a Gilliam por la confrontación entre lo espiritual y lo lógico racional. Sus películas son un collage de yuxtaposiciones temáticas: lo antiguo y lo futurista, lo real y lo imaginario, lo lógico y la locura...

Pero este tipo de visión creativa a veces puede originar conflictos con los intereses de los grandes estudios. Los presupuestos solicitados por Gilliam para el desarrollo de proyectos han dejado engavetados a varios de estos, incluyendo un intento de llevar a la gran pantalla la novela de Charles Dickens "Historia de Dos Ciudades", dos intentos por filmar "Watchmen" (el célebre cómic de Alan Moore que después logró realizar Zack Snyder), y un intento por realizar una secuela de su película de 1981, "Time Bandits". En 1999 su producción de "The Man Who Kill Don Quixote" topó con una serie de inverosímiles contratiempos que echaron por la borda el proyecto, quedando todo registrado en el genial documental "Lost in La Mancha". En enero de 2008 "The Imaginarium of Doctor Parnassus" casi corre la misma suerte tras la muerte de su protagonista Heath Ledger. La cinta logró salvarse por la intervención de los actores y amigos de Ledger, Jude Law, Johnny Depp y Colin Farrell. En algún momento la escritora JK Rowling mostró su interés en que Gilliam dirigiera las películas de Harry Potter, pero la Warner Bros. se rehusó rotundamente a ello.

Recientemente, Gilliam y Johnny Depp han retomado el proyecto de la película del Quijote, algo bastante metafórico para este quijotesco cineasta. Repasemos algunas de sus películas más emblemáticas.

Monty Python and the Holy Grail (1975):
Codirigida con Terry Jones, fue la primer experiencia de Gilliam dirigiendo una película, y sin embargo, ha pasado a la historia como una de las comedias más geniales e hilarantes que se han hecho. Toda una cinta de culto. La trama es una parodia basada en la leyenda del Rey Arturo, los Caballeros de la Mesa Redonda y la búsqueda del Santo Grial. Cada uno de los miembros de los Monty Python caracteriza a alguno de los personajes principales: el Rey Arturo (Graham Chapman), el escudero Patsy (Terry Gilliam), Sir Bedevere el Sabio (Terry Jones), Sir Lancelot el Valiente (John Cleese), Sir Robin el No-Tan-Valiente-Como-Sir-Lancelot (Eric Idle) y Sir Galahad el Puro (Michael Palin). Muchos son los elementos humorísticos que lograron el éxito de esta película, pero sin duda alguna dos de los preferidos por los fanáticos son el terco Caballero Negro y el temible Conejo Asesino de Caerbannog.


Brazil (1985):
Esta comedia negra de ciencia ficción tiene sus bases en el mundo totalitario descrito por George Orwell en "1984", aunque carece de uno de sus elementos principales: el "Gran Hermano". La trama se centra en la desventura de Sam Lowry (Jonathan Pryce), un burócrata que sueña con escapar del tedio del sistema al lado de su amante imaginaria. Mientras trata de arreglar un error de tipografía provocado por una mosca, y que llevó al arresto y ejecución de la persona equivocada bajo cargos de terrorismo, Lowry conoce a Jill Layton (Kim Greist), quien es la amante de sus sueños. Pronto Lowry se verá perseguido por el sistema, al ser considerado junto a Jill como cómplices del terrorista Harry Tuttle (Robert De Niro), un antiguo técnico en aires acondicionados que se reveló contra el régimen cansado de estar lidiando con el excesivo papeleo burocrático.


The Adventures of Baron Munchausen (1988):
Esta película de fantasía tiene como personaje principal al Baron Munchausen (John Neville), personaje literario de una serie de historias publicadas por Rudolf Raspe a finales del siglo XVIII, y que a su vez se basan en los extraordinarios relatos del aventurero alemán Karl Friedrich von Münchhausen. Ambientada en una ciudad europea sitiada por los turcos, Gilliam aprovecha la trama para plantearnos todo un discurso del conflicto entre la imaginación que libera y la razón que aprisiona. Esta última representada por el personaje del oficial de la ciudad, Horatio Jackson (Jonathan Pryce), quien censura con vehemencia los fantásticos e ilusorios relatos de Munchausen, acusándolos de ser un peligro para la agobiada ciudad.


12 Monkeys (1995):
La realidad se confunde en esta excelente película de ciencia ficción protagonizada por Bruce Willis, quien interpreta a un angustiado viajero en el tiempo llamado James Cole. Enviado desde un futuro próximo post apocalíptico hasta la década de los 90`s, Cole tiene como misión encontrar información sobre el Ejército de los 12 Monos, supuestos responsables de dispersar un mortal virus que diezmará a la humanidad y la obligará a vivir bajo tierra. Pero Cole es tomado como un loco y confinado a un hospital psiquiátrico. Su única oportunidad de cumplir su misión será convencer a su psiquiátra, Kathryn Railly (Madeleine Stowe), de que él no está demente y que el fin de la humanidad está a punto de comenzar. Gilliam logra un gran juego entre la realidad y la locura, basando a Cole en el clásico mito griego de Casandra, la profetiza a la que nadie le cree. Otra razón para ver esta película es la actuación de Brad Pitt como el esquizofrénico Jeffrey Goines, líder de los 12 Monos, quizás el mejor papel que le he visto a este actor.


Fear and Loathing in Las Vegas (1998):
Una de las más extravagantes y alocadas películas realizadas por Gilliam, está basada en la novela del mismo nombre del aún más excéntrico y alocado periodista Hunter S. Thompson, publicada originalmente en la revista "Rolling Stones" en dos entregas en 1971. La historia es una ácida crítica a la sociedad estadounidense de principios de los 70`s y al ideal del "sueño americano", narrada a través de un verdadero viaje de drogas que viven sus dos protagonistas, Raoul Duke (Johnny Depp) y el Dr. Gonzo (Benicio del Toro), durante un fin de semana en Las Vegas. Esta novela es en realidad autobiográfica, pues se basa en un viaje realizado por Hunter junto al abogado Oscar Zeta Acosta a Las Vegas, donde se suponía que debían reportar sobre la carrera Mint 400 para "Sports Illustrated". En principio la película iba a ser dirigida por Alex Cox, pero este no resultó del agrado de Hunter, quien por el contrario aprobó desde un inicio la vinculación de Gilliam como director.


The Brothers Grimm (2005):
En esta película Gilliam aprovecha los clásicos cuentos de los Hermanos Grimm (interpretados por Matt Damon y Heath Ledger) para imaginar una realidad en la cual estos autores del siglo XVIII son en realidad estafadores que utilizan su conocimiento del folklor local para ofrecer sus servicios como cazadores de brujas, espantos y otros monstruos en la Alemania ocupada por Francia. Pero todo da un giro cuando son arrestados por el general francés Delatombe (Jonathan Pryce), quien pone como condición para no ejecutarlos el que resuelvan la extraña desaparición de varias niñas en el pueblo de Marbaden. Ambos hermanos descubrirán allí que el bosque aledaño está de hecho embrujado por una siniestra reina (Monica Bellucci), quien utiliza la magia negra para mantenerse eternamente joven y hermosa. A pesar de su altísimo presupuesto, la película no logró el éxito esperado en taquilla, y la crítica acusó a Gilliam de haber sacrificado el argumento para complacer a la productora.


The Imaginarium of Doctor Parnassus (2009):
Esta hermosa historia transcurre en la Londres actual, donde el teatro ambulante del Doctor Parnassus (Christopher Plummer) trata de llamar la atención de los transeúntes sin mucho éxito. Pero detrás del misterioso espejo, centro del espectáculo y que permite a las personas entrar dentro de su propia imaginación, se esconde una contienda eterna entre el bien y el mal por el destino de las almas de quienes entran al espejo. Desde hace mucho tiempo Parnassus no logra ganarle un alma al diablo, Mr. Nick (Tom Waits), y su situación se agrava al acercarse el cumpleaños 16 de su amada hija Valentina (Lily Cole), pues debido a un trato que hizo para ser inmortal, el angustiado Parnassus está obligado a entregérsela a Mr. Nick. Sólo una nueva apuesta con el diablo y la aparición de un misterioso joven de nombre Tony (Heath Ledger), podrán salvar a Valentina de su destino. Esta es la última película dirigida por Gilliam hasta el momento y estuvo a punto de fracasar debido al suicidio de Ledger durante la filmación. Pero como se mencionó anteriormente, la participación de Law, Depp y Farrell logró salvar el proyecto, que sin embargo, tuvo que reelaborarse completamente para poder justificar la transformación del protagonista en los otros 3 actores. Maniobra creativa que le ha generado muchos aplausos al imaginativo Terry Gilliam.

Otras películas de Terry Gilliam incluyen "Jabberwocky" (1977), "Time Bandits" (1981), "The Fisher King" (1991) y "Tideland" (2005).